MOP y Onemi evalúan efectos de  primera gran crecida del río San José

Sólo en el kilómetro 46 de la Ruta A-27 en dirección al Santuario de Livílcar quedó cortada, debido a que el agua socavó 200 metros del camino

MOP y Onemi evalúan efectos de  primera gran crecida del río San José

15 de marzo de 2017

La primera gran crecida de esta temporada estival experimentó el río San José, tras producirse lluvias en la zona precordillerana durante el día de ayer, alcanzando un peak de 30 mil litros por segundo al anochecer. Ante ello el secretario regional ministerial de Obras Públicas, Jorge Cáceres, y el director regional de Onemi, Franz Schmauck, realizaron un recorrido por toda la extensión del valle de Azapa, con el fin de visualizar la existencia de personas aisladas o afectadas e infraestructura pública dañada.

Tras esta inspección, ambas autoridades detectaron que el volumen de agua provocó sólo daños de consideración en la Ruta A-27 en una extensión de 200 metros del kilómetro 46, por el camino que conduce al Santuario de Livílcar.

El seremi de  Obras Públicas, Jorge Cáceres, anunció que la Dirección de Vialidad dispondrá la rehabilitación del camino al más breve plazo, y que, paralelamente, en una zona cercana a ese sector se iniciará la construcción un nuevo puente tipo badén, que permitirá el encauzamiento y una mejor evacuación de las aguas.

“Anoche el río San José alcanzó el peak de toda la temporada, registrando 30 mil litros por segundo. Esta crecida socavó un tramo de la Ruta A-27, el cual esperamos rehabilitar prontamente. En este recorrido que hicimos, hemos ido evaluando en toda la extensión del valle de Azapa, el comportamiento de obras como puentes tipo cajón que hemos construido en Punta Cabuza y Cerro Blanco y los trabajos de encauzamiento realizados. La combinación de ambas ha permitido que el río siguiera un curso más ordenado y no provocara daños de magnitud como ha ocurrido en otras ocasiones”, indicó.

La autoridad hizo un llamado a los conductores y peatones, a no realizar maniobras o conductas riesgosas, intentando cruzar los distintos atraviesos que existen a lo largo del valle de Azapa, “ya que si bien el escurrimiento de las aguas tiene tendencia a la baja, aún podrían haber nuevas crecidas y con ello se podrían producir cortes temporales por el exceso de agua que podría bajar”.

Por su parte, el director regional de Onemi, Franz Schmauck, precisó que, pese a que esta ha sido la crecida de mayor envergadura de esta temporada, “afortunadamente no hay afectación a personas.  Lo que nos debe alegrar es que en cada recorrido realizado durante todo este periodo de lluvias, hemos constatado que la infraestructura pública ha resistido muy bien, al punto que no ha habido mayores dificultades con los caminos, especialmente. Eso habla muy bien de que se han tomado medidas preventivas en torno a la infraestructura, las cuales han sido bastante eficientes, especialmente la construcción de puentes y los trabajos de encauzamiento”.