Durante tres años, ingenieros y químicos de la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC), estudiarán la composición de los contaminantes naturales del río Azufre y las formas de mitigación de estos aportes al río Lluta, con el fin de mejorar las aguas de riego que dispone este valle de la Región de Arica y Parinacota.
El equipo liderado por los profesores del Departamento de Ingeniería Hidráulica y Ambiental de la PUC, Pablo Pastén y Gonzalo Pizarro, dieron a conocer los alcances del “Proyecto Plan de Mejoramiento y Protección de Recursos Hídricos en el valle de Lluta”. La iniciativa cuenta con financiamiento del Programa Innova Chile y del Gobierno Regional por 350 millones de pesos, y el patrocinio del Ministerio de Obras Públicas, a través de la Dirección General de Aguas y de la Dirección de Obras Hidráulicas.
En sendas reuniones con el intendente Rodolfo Barbosa y con el secretario regional ministerial de Obras Públicas, Guillermo Beretta, y luego en la constitución del Consejo Regional Consultivo compuesto por distintos servicios públicos para el seguimiento del Proyecto, el grupo de investigadores dio a conocer los alcances de este estudio científico que, al cabo de tres años, deberá proponer obras que permitirán mejorar la calidad de aguas del río Lluta.
El seremi Guillermo Beretta valoró la realización de esta investigación, señalando que “la visión del Gobierno Regional de apostar por estudios de ciencia aplicada, es un gran paso para esta región. Hoy existen muchas presunciones sobre el Lluta, pero para potenciar la agricultura como eje de desarrollo, debemos conocer científicamente las limitantes que hay con el agua y desarrollar alternativas que hoy dispone la ingeniería hidráulica, para hacer más productivo este valle que posee recursos hídricos importantes”.
Beneficios del estudio
El director del equipo científico de la PUC y experto en Geoquímica, Pablo Pastén, destaca que el año pasado el mismo grupo entregó los resultados de un diagnóstico que efectuó a la cuenca del río Lluta, para identificar los agentes contaminantes de los afluentes que aportan aguas a este cauce.
“Justamente ese diagnóstico nos generó la necesidad de hacer un nuevo estudio, teniendo claro los aportes químicos que hacen los ríos Azufre y Colpitas en la parte alta. Fue gracias a esa investigación que determinamos que el aporte más contaminante lo hace el río Azufre desde el sector del volcán Tacora. Teniendo en cuenta ello, es que hemos focalizado el estudio en esta zona y nuestra apuesta es proponer obras que mitiguen esta situación”, advirtió.
Pastén indica que, dentro de las obras que la ingeniería considera para mejorar la calidad de aguas, podría implementarse un canal de desvío para las aguas de mala calidad, mejorar los pretiles de evaporación del río Azufre que hoy tiene el MOP en el sector, o implementar sistemas de tratamiento de aguas, entre otras.
Otra de las virtudes de este proyecto, según destaca el científico, es que aportará antecedentes claros del estado actual del recurso hídrico disponible en la cuenca del río Lluta. “Es muy importante este aspecto, considerando que a futuro pueden existir proyectos de explotación de los recursos del suelo y subsuelo en el sector, cuyos efectos sobre el recurso hídrico disponible podrán medirse, teniendo información de cómo era su cantidad y composición previa”, sostuvo.
El experto en Geoquímica plantea que los resultados de este estudio también servirán como insumo para el “Diseño del Embalse Chironta”, que se inició este año a través de un contrato licitado por la Dirección de Obras Hidráulicas del MOP. Al respecto, Pastén precisa que la propuesta de realizar obras para mejorar la calidad de las aguas antes de que lleguen al embalse, podría significar un beneficio para el manejo de la represa, ya que contaría con aguas más puras para su distribución y se podrían controlar algunos riesgos ambientales.